Diagnostico cancer de colon

Existen varias alternativas. La elección entre una y otra depende de la decisión de cada persona convenientemente informada por su médico. En principio, como norma general, es recomendable iniciar alguna de estas medidas en la población general a partir de los 50 años, o antes en el caso de que existan factores de riesgo.

  1. Tacto rectal: es parte de la exploración física general.
  2. Test de sangre oculta en heces: permite detectar pequeñas cantidades de sangre en las heces, que no son identificables a simple vista. Se puede realizar en casa y enviar las muestras a un centro médico. Es importante seguir las instrucciones para que sea eficaz, ya que el resultado puede no ser acertado por múltiples causas. Además, para conseguir buenos resultados en cuanto a prevención, es necesario realizar este test al menos con frecuencia bianual. En caso de que el test sea positivo, es necesario realizar otras exploraciones para detectar la causa del sangrado.
  3. Sigmoidoscopia: consiste en la introducción de un tubo flexible a través del ano, que tiene un sistema de vídeo en su extremo y permite ver de esta forma la pared intestinal, en una longitud concreta (la porción izquierda del colon). Se pueden detectar y tratar pólipos o cáncer en la parte de colon explorada. Esta prueba requiere una preparación para limpiar el colon, y permitir una mejor visualización de la pared. Produce molestias abdominales por aire introducido a través del tubo, que en general no son muy importantes y no precisan sedación. La existencia de lesiones puede hacer necesaria una exploración completa del colon.
  4. Colonoscopia: se utiliza un tubo flexible, similar al anterior, pero más largo, y se ve la pared de todo el colon. Requiere una mayor preparación (limpieza) del colon, y produce más molestias que la sigmoidoscopia, por lo que frecuentemente se utilizan diversos tipos de sedación. la colonoscopia es el método diagnóstico de elección; es la prueba más sensible y específica, y permite obtener biopsias y realizar la resección de pólipos.
  5. Enema opaco: se introduce una sustancia por el ano que es visible con rayos X. Se rellena de esta forma el colon y se sacan radiografías. Podría compararse con el negativo de una fotografía. Existen diversas técnicas que permiten mejorar su resolución. Permite solamente detectar lesiones, pero no es posible tomar muestras de éstas ni extirparlas, por lo que, en caso de encontrarse alguna alteración, es necesario realizar exploraciones complementarias. Requiere una preparación similar a la de la colonoscopia y produce algunas molestias abdominales por el material de contraste y el aire introducidos, aunque son molestias en general más leves que las originadas por la colonoscopia.
  6. Otras exploraciones: en la actualidad se están desarrollando técnicas cuyo objetivo es ver la pared del colon en su totalidad, disminuyendo las molestias asociadas a la realización de una colonoscopia. Es el caso de la llamada «colonoscopia virtual», que es una técnica radiológica que permite ver el interior del colon sin necesidad de introducir un tubo a través del ano. Sin embargo, aunque es una técnica prometedora y ya muy desarrollada, su utilidad en este campo todavía no está plenamente consolidada.
  7. También se está investigando en la eficacia de determinados análisis de sangre o heces, aunque en este caso todavía disponemos sólo de resultados preliminares y no aplicables a la práctica clínica habitual.
fuente: www.cun.es/area-salud/enfermedades/aparato-digestivo/prevencion-cancer-colon