Fibra contra el cancer de colon

¿Cómo funciona la fibra a nivel gastrointestinal?
Una de las ventajas de la fibra es que adsorbe y retiene agua. Cuando el estómago tiene fibra, mantiene un nivel de humedad alto que posibilita que las vías digestivas puedan moverse con facilidad, lo que favorece la digestión y reduce su tiempo de duración.
Los efectos fisiológicos de la fibra en el sistema digestivo son:

  • En el estómago: La fibra desencadena un aumento de la salivación porque necesita más tiempo de masticación y causa, por tanto, un retraso en el vaciado gástrico. La fibra soluble se puede utilizar en dietas para adelgazar porque aumenta el volumen del bolo alimenticio y produce sensación de saciedad.
  • En el intestino delgado: El aporte de fibra en la alimentación activa las vellosidades intestinales e incrementa su tamaño. De esta manera, disminuye o retrasa la absorción de materias orgánicas e inorgánicas. Esta cuestión es importante en el metabolismo de la glucosa (fibra soluble) y del colesterol (fibra soluble y lignina).
  • En el intestino grueso: La fibra acelera el tránsito en el intestino grueso porque aumenta la masa fecal y a su vez, estimula la propulsión de las heces.
La fibra insoluble presente en el salvado de los cereales actúa fundamentalmente en el tránsito intestinal. Ello es debido a que la celulosa que contiene el salvado y las plantas verdes posee un efecto laxante superior al de la fibra soluble.
La propiedad de la fibra de incrementar el tránsito intestinal le confiere la propiedad de prevenir el cáncer de colon, porque elimina rápidamente sustancias cancerígenas que pueden entrar en contacto con las paredes intestinales y dañar las mucosas.
Beneficios de la fibra dietética o alimentaria para la salud
A la fibra se le atribuye un papel beneficioso en la prevención de las llamadas enfermedades degenerativas, dentro de las que se encuentran las cardiovasculares, la diabetes y las neoplasias de colon.
Los beneficios de las fibras dietéticas para la salud datan desde épocas remotas, en un papiro egipcio del siglo XVI a.c. considerado como el libro más antiguo que ha llegado a nuestros días, se explica que las enfermedades son producto del envenenamiento producido por sustancias liberadas durante la descomposición de los alimentos en los intestinos. Esta teoría influyó en la sociedad médica por más de tres milenios, incluso el médico de Louis XV en el siglo XVIII asociaba las enfermedades con la contaminación de la sangre por heces fecales.
Ya a finales del siglo XVIII y hasta mediados del siglo XIX, los médicos estaban convencidos de que la constipación era dependiente de la dieta, del nivel de actividad física y del ritmo de vida, y que la falta de regularidad en la evacuación podría corromper a todo el organismo.
Una teoría más reciente descrita a finales del siglo XIX planteó que la flora intestinal descomponía los residuos proteicos presentes en las heces y los convertía en compuestos tóxicos. El médico francés Charles Bouchard declaró que la persona con estreñimiento está trabajando para su autodestrucción, hace intentos de suicidarse por intoxicación. Por su parte, el cirujano de origen inglés Sir William Lane a partir de observaciones planteó que el estreñimiento es un mal de civilizaciones industrializadas y su frase favorita era, entre más blanco es el pan, más rápido mueres.
Así se sembró la teoría contemporánea de que la fibra ayuda a prevenir el cáncer de colon. Los primeros estudios se realizaron en las colonias británicas de África; se observó que los africanos y los ingleses padecían de enfermedades distintas, pero si los primeros adoptaban las costumbres de los británicos acababan enfermando de la misma manera que ellos.
En 1976, el médico Hugh Trowel define la fibra dietética como aquella sustancia procedente de las plantas y formada por un conjunto de macromoléculas que no pueden ser digeridas por las enzimas del tracto digestivo. Posteriormente se dio la definición más certera de fibra dietética desde la óptica de los conocimientos actuales. Ella señala que el citoesqueleto de los vegetales es lo que se denomina como fibra dietética, sustancia aparentemente inerte y que puede ser fermentada por algunas bacterias, pero no desdoblada por las enzimas digestivas, y por tanto, resulta imposible de absorber. Las propiedades son muy diversas, en dependencia de la especie y de la variedad vegetal de procedencia.
En la actualidad, la fibra dietética es reconocida como un alimento funcional, por sus amplios beneficios para la salud. Equilibra el nivel de colesterol, previene la formación de varices y hemorroides, combate el incremento de glucosa en sangre y evita las caries.
La fibra, especialmente la soluble, arrastra colesterol y con ello disminuye su absorción. Por otra parte, los ácidos biliares que normalmente son reabsorbidos por el organismo son retenidos por las fibras solubles y eliminadas. Esa provocada disminución de ácidos biliares por el efecto de la fibra da lugar a la conversión de colesterol en nuevas moléculas de ácidos biliares. Ese mecanismo logra la disminución significativa de colesterol del organismo.
Con la prevención del estreñimiento se evita la formación de hemorroides y se favorece la circulación de retorno, eliminando uno de los riesgos de padecer de varices.
La fibra soluble que se encuentra en las leguminosas es beneficiosa para los diabéticos porque logra la absorción lenta de los hidratos de carbono en el intestino delgado. Ello evita una elevación brusca del nivel de glucosa en sangre.
La fibra vegetal le agrega volumen a la dieta y es por eso que la persona siente saciedad más rápidamente. Por estas razones y por asociarse con alimentos ricos en vitaminas y minerales se recomienda para ser empleados en dietas con diferentes fines, tanto estéticos como terapéuticos.
Todos los alimentos ricos en fibras necesitan ser masticados más tiempo y con ello se remueven las partículas que pueden quedar retenidas entre los dientes. Ello provoca además una mayor secreción de saliva, factores que evitan la formación de caries.
La fibra además equilibra la flora del colon. Como la fibra no es digerida en el estómago ni en los intestinos pasa directamente al colon. Ella le sirve de alimento a un gran número de bacterias que forman parte de la flora microbiana que habita en él, lo que favorece su multiplicación en detrimento de microorganismos patógenos y de sustancias tóxicas generadas como atributos de su virulencia.
Gandhi dijo un día que un minuto que pasa es irrecuperable. Conociendo esto ¿cómo podemos malgastar tantas horas? y alguien afirmó de las cosas que tienes, escoge las mejores…
Entonces, conociendo el beneficioso papel de la fibra en la dieta solo nos queda incorporarla. Es la forma de hacernos eco de la frase de Tryon Edwards cuando dijo las acciones correctas para el futuro son la mejor disculpa de las equivocaciones del pasado.
fuente: www.sld.cu